Hietel: Nuestra Historia

En la vida de toda organización tiene que haber un momento de análisis de la historia para saber en el presente donde se está y qué proyecciones se tienen para el futuro. La HIETEL en el poco tiempo que lleva creada, ha tenido una energética e intensa historia, un presente en continua renovación y un futuro basado en la esperanza de justicia colectiva.

En octubre de 1984, siete compañeros telefónicos fundaron la Hermandad Independiente de Empleados Telefónicos Inc. (HIETEL). Estimulados por el fraternal compañerismo para sostener las garantías, conquistas, derechos y los principios de la contratación colectiva como el instrumento más eficaz para mantener la paz industrial, los derechos establecidos y los que se establecieran mediante las conquistas de esta nueva organización "bonafide" , emprendieron su camino.

En diciembre de 1985 se celebró nuestra primera elección para decidir si esta recién creada organización bonafide podía representar a los compañeros técnicos y profesionales de la Puerto Rico Telephone Co. No fue en esta ocasión que la HIETEL obtuvo el derecho a la negociación colectiva. No obstante, en el 1986, la Hermandad Independiente de Empleados Telefónicos, fue instituida como una organización bonafide en el Departamento del Trabajo bajo la Ley 134.  Con grandes esfuerzos, llegamos al año 1993 donde se celebró una segunda elección. Como resultado de la misma, la HIETEL fue reconocida en febrero de 1995 bajo la ley 130 como la representante exclusiva de los empleados profesionales y técnicos de la PRTC.

En junio de 1995, el Comité Ejecutivo de la HIETEL, como miembros del Comité Negociador, comenzó a negociar nuestro primer Convenio Colectivo. Durante esa negociación, en abril de 1996, se inició nuestra primera huelga por  asuntos de contratación en la Unidad Apropiada recién creada. Esta huelga duró tres días. Seis meses más tarde, en medio de la negociación del Convenio, en octubre, nuestra matrícula decretó una huelga, en esta ocasión por un tranque en las negociaciones del Convenio Colectivo. La huelga duró cerca de tres semanas y culminó en la firma de nuestro primer Convenio Colectivo, asegurando los beneficios y tenencias de empleo de los empleados profesionales y técnicos por un término de tres años desde octubre de 1996 a octubre de 1999.

Bajo la administración y gobernación del Dr. Pedro Roselló fue anunciada la intención de vender una de las corporaciones públicas más lucrativas en el gobierno de Puerto Rico, nuestra Telefónica. Ante la filosofía de la privatización y esta nueva amenaza contra nuestros empleos, en fuerte oposición, la HIETEL decretó un Paro Nacional contra la Privatización, el 11 de julio de 1997. El 1ro. de octubre de 1997 protagonizamos, en contra de la política de privatización y contra la venta de la Telefónica, el Paro Nacional más grande en la historia de Puerto Rico. La HIETEL, en su misión por defender nuestros trabajos, salarios y condiciones de trabajo ya adquiridos y por preservar el patrimonio y el interés social, económico y cultural que ha tenido nuestra Telefónica para nosotros y el pueblo de Puerto Rico, el 18 de junio de 1998 se lanzó a la calle por más de 40 días en una lucha jamás vista en la historia sindical del Pueblo de Puerto Rico.

En esta última huelga  tomamos el lugar que le toca por mandato del pueblo a la rama legislativa. Debido a su falta de sensibilidad y compromiso, el pueblo vio en los Telefónicos (HIETEL - UIET) una válvula de escape donde expresar su indignación ante los desmanes de una administración que no escuchó ni respetó la voluntad del pueblo.  Ese mismo pueblo nos apoyó. Por cuarenta días las familias puertorriqueñas, el comercio, la banca y la industria se hicieron eco del clamor del pueblo y por más de 40 días, fuimos los protagonistas de la lucha sindical más grande que se haya dado en Puerto Rico.

Entre los logros alcanzados durante esta huelga podemos enumerar los siguientes:

  • Se comprobó en menos de dos semanas que en la transacción no hubo ninguna clase de competencia, sino que todo estaba destinado a favorecer a la GTE y que la legislatura no tuvo criterio propio, convirtiéndose así en sello de goma del Gobernador y de los grandes intereses económicos.
  • Solo con nuestra huelga el precio de venta subió más de 100 millones de dólares desenmascarando a los que se daban con piedras en el pecho en el sentido de que el  precio de a Telefónica era el mejor y justo para Puerto Rico.
  • Nuestra huelga logró más garantías de empleos. La más importante fue la seguridad de empleo donde la nueva compañía tuvo que asegurar que no despediría empleados.
  • Garantía al pueblo de no aumentar tarifas por los próximos tres (3) años.
  • En cuanto al movimiento obrero, la huelga de los Telefónicos le devolvió el respeto y la posición que se merece, dándole un mensaje al gobierno de que en lo sucesivo, tienen que contar con el pueblo trabajador.
  • Demostró que el Movimiento Obrero tiene poder de convocatoria.  Ha sido demostrado en los años 1990, 1997 y 1998.
  • Unificó a ambas organizaciones sindicales de los Telefónicos HIETEL Y UIET, en las luchas de intereses en común.
  • Hubo mayor participación y liderato de la mujer.
  • Sirvió en el desarrollo de nuevos líderes en nuestra organización y organizaciones hermanas.
  • Hubo una falsa imagen respaldada de millones de dólares en publicidad dentro y fuera de Puerto Rico. Se demostró que la privatización de los servicios esenciales, en nuestro país no traería consigo las grandes inversiones y ganancias, y mejoras en servicio y calidad.
  • El gobierno supo que estaba en su peor momento y que no tendría el apoyo de los trabajadores, estudiantes y del pueblo en general, de no escucharlos. También supo que la sangre derramada por nuestros hermanos en esta huelga tenía un precio demasiado alto para medirlo en dólares y centavos.
  • Los Telefónicos nos ganamos el respeto del Movimiento Sindical dentro y fuera de Puerto Rico, habiendo probado nuestra militancia y combatividad por nuestros principios.
  • Nos ganamos el respeto de los futuros compradores de la PRTC, ya que estarán convencidos de que tienen que contar con los Telefónicos si quieren desarrollar su negocio.
  • Nuestros compañeros entendieron y fueron fuente de información para nuestro pueblo del por qué nos oponíamos a la venta de la Telefónica y sobretodo abrió los ojos y las mentes de muchos sobre el propósito fundamental de nuestra oposición a la política de privatización.

Esta huelga será recordada como el día en que el pueblo dijo basta.  ¡Basta a la arrogancia! ¡Basta al atropello! ¡Basta a la imposición! La HIETEL se siente orgullosa de esta gesta gloriosa. No obstante, éste es solo el comienzo y los trabajadores debemos estar preparados para luchar junto al pueblo en estas luchas de principios, por su dignidad, orgullo e identidad.

Aún con la inmensa oposición demostrada, el gobierno abandonó al pueblo que los llevó al poder y en julio del 1998 anunciaron la triste noticia de que se había completado la transacción de venta de nuestra Telefónica a la empresa GTE.

En septiembre de 2000, comenzamos a negociar un nuevo convenio colectivo con el nuevo patrono privado bajo la Ley "Taft Hartley". Estuvimos por más de trece (13) meses en reuniones contínuas para llegar a la culminación de lo que fue nuestro segundo Convenio Colectivo que tuvo una vigencia de octubre de 2000 hasta octubre de 2003. En esta ocasión, asegurando los beneficios y tenencia de empleo de todos los empleados profesionales y técnicos afiliados a la HIETEL  que trabajaban para la empresa GTE.

Posteriormente, hubo una fusión entre las compañías GTE y Verizon. Con Verizon logramos la firma de nuestro tercer Convenio Colectivo que representó beneficios y tenencia de empleos asegurados para los empleados profesionales y técnicos por un período de cinco (5) años; desde enero de 2004 hasta diciembre de 2008.

En el mes de octubre de 2006, celebramos el vigésimo segundo (22) aniversario de la HIETEL y el décimo aniversario de nuestro primer Convenio Colectivo.

Nuevamente nos toca a las puertas el anuncio de venta de los activos de PRT/Verizon.  Desde finales del año 2005, comienzan rumores sobre la intención de venta a la compañía multimillonaria proveedora de telecomunicaciones en México, Telmex. Aún cuando los portavoces de la PRT/Verizon se negaron a emitir comentarios sobre este tema, los rumores se volvieron más y más fuertes. En el mes de abril de 2006, la PRT/Verizon confirmó que hubo un acuerdo de venta a la Compañía América Móvil, proveedora de servicios inalámbricos de Latinoamérica y Teléfonos de México (Telmex). En esta transacción se incluyó  la venta de los negocios de Verizon en República Dominicana y Puerto Rico.

En marzo de 2007 se confirma la adquisición de la empresa mejicana, América Móvil, del cien por ciento (100%) de las acciones de Telecomunicaciones de Puerto Rico. Gracias al Artículo 58, Estabilidad del Convenio, que establece que es obligación de cualquier patrono sucesor el garantizar el Convenio vigente, América Móvil (Claro) honró hasta la fecha de su expiración el Convenio Colectivo.

Como consecuencia de la segunda venta de nuestra Telefónica surgieron cambios, donde la HIETEL logra una reorganización sin activar un plan de cesantías, que de haberse implantado hubiera trastocado las vidas de muchos afiliados.

En abril de 2008, se le notifica al Presidente de PRTC/CLARO el interés de la HIETEL a comenzar la negociación de lo que se convertiría en nuestro cuarto Convenio Colectivo. Las negociaciones comenzaron en agosto de 2008. Luego de veinte y ocho (28) meses en reuniones continuas y de mucha lucha, llegamos a la culminación de lo que es nuestro cuarto Convenio Colectivo, con vigencia de diciembre de 2010 hasta diciembre de 2014.

Nuestras luchas no han sido en vano. Los sacrificios que hemos realizado para  mejorar nuestras condiciones de empleo a beneficio de nuestras familias y sociedad  puertorriqueña, no terminan con estas páginas de la historia de la HIETEL ni con las reivindicaciones alcanzadas hasta hoy. Apenas es un comienzo del transcurso que nos falta por recorrer. Nuestra meta futura deberá presentar continuidad en la protección de los derechos adquiridos de nuestros afiliados profesionales y técnicos, sin olvidar que nuestra HIETEL debe permanecer como un mecanismo de luchas constante, en reclamo de la reivindicación de los derechos de todos los hombres y mujeres que día a día buscan alcanzar la dignidad y justicia por el trabajo. 

¡Con el mismo tesón y firmeza que nos ha caracterizado durante los pasados 28 años de lucha, la Hermandad Independiente de Empleados Telefónicos, permanecerá como defensor de la dignidad y justicia de nuestros hermanos telefónicos, nuestras familias y nuestra sociedad puertorriqueña!

En octubre de 2012, celebramos el vigésimo octavo (28) aniversario de nuestra Hermandad. Felicitamos a todos los compañeros delegados y trabajadores de la HIETEL, que han sido protagonistas de nuestras reivindicaciones.